Meneáme La

Mi primera experiencia en Menéame y seguramente la última.

Solo había entrado para probarlo puesto que tanta fama que tiene el Elefante "rosa" y su trompa para menear noticias y comentarlas. Pero lo único que se menean por allí son demasiadas hormonas, muchas feromonas y demasiados críos y gente con serios complejos, con mala leche y que da la sensación que están en la edad del pavo y escociéndoles la entrepierna.

Es curioso que algo que he notado es que no he visto, o al menos yo no me he cruzado, con ninguna mujer en ese lugar, algo muy frecuente en sitios donde la abundancia de testosterona masculina campea a sus anchas y se respira un aire machista o con demasiado olor a macho que echa para atrás; y no es baladí lo que digo porque la primera noticia que he comentado ha sido acerca de un estudio de un psiquiatra acerca de los peligros del cibersexo y su repercusión en las relaciones hombre-mujer ha sido cuando menos un full contact con individuos que se ponían nerviosos en cuanto les mencionaba las cualidades y superioridad evolutiva de la mujer motivo por el cual el artículo en cuestión alertaba del deterioro del hombre respecto a la libertad, cada vez más de una mujer bastante quemada por el machismo y los hombres-mono que salen a cazar hembras con la cachiporra de trogloditas.

Aquí el enlace de la noticia meneada

Lo primero que me ha llamado la atención es que lejos de comentar la noticia los comentarios iban dirigidos hacia la mujer misma tachándola poco menos de nombres y calificativos que a cualquiera que pase por allí cuando menos le chocan. ¿A qué viene tanta virulencia atacando a la mujer casi poniéndola de culpable por el tema que se debatía?

Viniendo de muchos sitios donde siempre percibo lo mismo, una especie de misoginia solapada que en cuanto tocas el menor punto crítico de los machos disparados que pululan por esos sitios descubres que la mayoría o bien tienen un problema con las mujeres o sencillamente, más que las mujeres, lo que les interesa son los de su propio sexo.

Y digo esto porque la calidad de los comentarios no dejaban lugar a dudas, al menos para un psicólogo o alguien muy experimentado en la Psicología o/y Psico-Análisis del comportamiento humano.

Buscando más por este sitio, y poniendo una nota  para ver qué sucedía (en la sección de notas) preguntándo de manera ingenua si Menéame es para homosexuales, el resultado no ha podido ser más aclaratorio: un montón de gays lanzándose a la yugular con la simple pregunta.

Algunos no lo eran, pero la mayoría han atacado de manera virulenta y acusándome de homófobo, cosa normal cuando te metes con ellos o simplemente les preguntas por esta cuestión puesto que su tolerancia hacia cualquier crítica, cuestionamiento o planteamiento sobre su condición pasas a ser directamente un homófobo, un pepero, un cristofacha, o un comecristos; cuestiones, por cierto, con las que están muy obsesionados hasta casi lo patológico.
De esto hablaré largo y tendido algún día, que es muy interesante.

Vuelvo a repetir que no he visto a ninguna mujer en ese sitio, o al menos no tengo constancia que lo lógico hubiera sido que alguna hubiera comentado algo sobre la noticia en cuestión puesto que dejaban a la mujer en muy mal lugar y el único que la defendía y que corroboraba la tesis del artículo era yo mismo.

No es malo que hayan tantos homosexuales cabreados en ese sitio, o la mayoría de ellos, no digo que lo sea, pero que primero avisen o pongan un letrero en la puerta para saber a lo que me atengo.

Y repito que no me he encontrado con ninguna mujer en ese sitio, o si las hay serán minúsculas y contaditas.

Uno no sabe donde se mete a veces, pero lo bueno de Internet y del mamoneo de la Web 2.0 y el uso que hacen algunos colectivos de él es que lo puedes mandar todo a hacer puñetas enseguida y cuando te de la gana con un click de ratón.

Podría explayarme más, pero me aburre soberanamente hablar de esta gente "andrógina" (según ellos) y de sus foros, blogs, meneos y chats para ligar entre ellos, que no son más que eso.